| PIEL DE CADÁVERES DA UNA OPORTUNIDAD DE VIDA
· Convenio entre el Poder Judicial y Hospital Nacional de Niños permite injertar piel a víctimas de quemaduras
· Proceso para la toma de piel tarda 30 minutos y no deja cicatriz o evidencia
A sus 15 años, Esteban Zamora cuenta su historia de sobrevivencia, después de que a los 2 años de edad sufriera quemaduras en un 85% de su cuerpo, luego de que su casa ardiera en llamas.
“Esteban, no es una víctima de quemadura, es un sobreviviente” así los describen los médicos ya que es un caso extraordinario, porque comúnmente un niño no logra sobrevivir con el grado de quemaduras que presentaba, más aún en un tiempo en que la tecnología no estaba tan avanzada y no existía el Banco de Piel que ahora permite una esperanza de vida para muchos niños.
Según Carlos Siri, Jefe de la Unidad de Quemados del Hospital Nacional de Niños, Esteban es uno de los dos menores de edad que cada día sufren quemaduras en su cuerpo y que son atendidos en algún centro médico del país.
Debido a la cantidad de casos, el Hospital creó el Banco de Piel, que permite realizar injertos en menores con quemaduras extremas y así poder salvarles la vida.
Este servicio logra su objetivo gracias a un convenio suscrito con el Poder Judicial, que permite que con la autorización de las familias se tome piel de los cadáveres, para posteriormente y cuando el caso lo amerita, el Hospital Nacional de Niños injerta piel para disminuir las complicaciones y así ayudar a que el niño o niña sobreviva.
Dicho centro médico cuenta con personal capacitado que extrae la piel del cadáver, en las instalaciones de la Sección de Patología Forense, ubicada en la Ciudad Judicial de San Joaquín de Flores.
La toma de piel se hace en partes no visibles del cuerpo, por lo que solamente se extrae una pequeña porción de la espalda y de los muslos. Según los médicos, muchos piensan que se trata de mutilar, sin embargo no es así.
“Cada vez que una familia acepta salvar a un niño permitiendo tomar piel de un cadáver, se procede a hacer exámenes, después de la autopsia se limpia la piel, se rasura y con aparatos de precisión tomamos una pequeña porción de piel, que es algo similar a un tela de cebolla” dijo el Dr. Siri.
De acuerdo con el Dr. Carlos Siri en ningún momento se corta, solamente se hace una especie de raspón para sacar la piel, además las porciones son tan delgadas que los familiares no notan la toma de piel.
Todo el proceso dura alrededor de 30 minutos, por lo que esto no genera un retraso a las familias, para retirar el cuerpo de su ser querido.
El Doctor Raúl Bonilla, Jefe de la Sección de Patología Forense hace un llamado a las familias para que acepten donar piel de los cadáveres, ya que al año no se aprovecha la extracción de piel de unos 3500 cuerpos, por lo que deja de lado la posibilidad de salvar a una persona con quemaduras.
Bonilla añadió que los requisitos previos o básicos para dicha extracción es que la persona tenga menos de 24 horas de fallecida, que no tenga lesiones en la piel y que su edad sea entre 18 y 65 años.
“La importancia radica en que la gente comprenda que aún después de la muerte, podemos ser útiles para salvar la vida de otras personas que sufren quemaduras en su cuerpo. Los seres humanos son muy apegadas a los corporal y dejan que la muerte se lleve todo, a pesar de que puede seguir ayudando a otras personas que lo necesitan y que incluso pueden llegar a ser hasta familiares” dijo el Dr. Bonilla.
Cabe destacar que el Banco de Piel tiene la capacidad de tener hasta cinco mil bolsitas de piel.
En la actualidad, el Hospital Nacional de Niños cuenta con una psicóloga para lograr que familias den un sí a la toma de piel de un allegado fallecido.
Así que si en el futuro pasara por algún momento doloroso de perder a un ser querido, también piense en los que sufren y el cambio de vida que puede generar su decisión.
El Banco de Piel agradecerá el aporte de salvar vidas y en caso de que sea el momento de tomar una decisión, puede llamar al 25 23 36 00 del Hospital Nacional de Niños.
Esteban es un ejemplo de lo que muchos niños sufren y han sufrido por quemaduras, él mismo reconoce que el Banco de Piel es una esperanza de vida para muchos niños de Costa Rica; sin embargo para todo ello se necesita que más personas se animen a colaborar con la donación de piel de aquellos que recientemente hayan partido de este mundo. | | |
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