| En cumbre de cambio climático
Presidente Arias aboga por la reducción de emisiones de carbono en países desarrollados
• Mandatario es uno de los cinco oradores en la cumbre, junto a Barack Obama y Ju Hintao
• Secretario General de la ONU, pide llegar a un trato específico en Copenhagen
• Barack Obama impulsa el uso de energías renovables para mitigar los efectos del cambio climático
New York, martes 22 de setiembre de 2009. “El dilema que enfrentamos es brutalmente sencillo: los países desarrollados pueden hacer mucho por reducir sus emisiones de carbono, pero no será suficiente; los países pobres pueden hacer algo, pero no será significativo; y las naciones de renta media pueden hacer bastante, pero sin energía limpia y barata afectarán el ritmo de crecimiento de sus economías. Este empate político global nos lleva directo al acantilado. Necesitamos hacer más, y sobre todo necesitamos hacerlo más rápido. No tenemos veinte, cuarenta o sesenta años para cambiar radicalmente las cosas. Tenemos, a lo sumo, ocho años".
Con estas palabras el Presidente de la República, Oscar Arias Sánchez inició su discurso en la Cumbre de Cambio Climático que se lleva a cabo en el margen de la Asamblea General de las Naciones Unidas, en la ciudad de New York.
En este encuentro en el cual participan alrededor de 180 países del mundo, el mandatario de la República fue uno de los 5 oradores entre ellos, Barack Obama, Presidente de los Estados Unidos; Hu Jintao, Presidente de la República Popular China y Nicolás Sarkozy, Presidente de Francia.
En el acto de inauguración, el Secretario General de la ONU, Ban Ki Moon, instó a las naciones principalmente a las potencias mundiales a que lleguen a un trato en la próxima conferencia mundial de Copenhague para mitigar el cambio climático
El Mandatario de Costa Rica aseguró que es preciso que abandonemos la penosa práctica de eludir las responsabilidades mediante el juego de las excusas y las recriminaciones. “Espero, eso sí, que las naciones que más han contribuido a crear este estado de cosas, y que más provecho han derivado de un desarrollo insostenible, tengan también la hidalguía de ser hoy las más dispuestas a enmendar el rumbo y prestar una mano solidaria. En este tiempo, debemos idear la manera de traer el precio de las energías renovables a un nivel accesible para las naciones en vías de desarrollo. Debemos mejorar sustancialmente la eficiencia de nuestro consumo energético actual. Debemos preservar urgentemente los bosques que están siendo destruidos, declarando zonas protegidas, compensando a los propietarios de bosques privados, y llevando a escala mecanismos como el Programa de Reducción de Emisiones de Carbono, causadas por la Deforestación y la Degradación de los Bosques, la iniciativa REDD+ de las Naciones Unidas”.
Arias, propuso un mayor acceso a los países en desarrollo del uso de energías renovables, al tiempo que instó a una alianza entre la empresa pública y la empresa privada para lograr la conservación ambiental.
Del mismo modo, el Presidente de los Estados Unidos, Barack Obama, subrayó el uso de energías renovables como uno de los principales objetivos para mitigar los efectos del cambio climático.
“Durante muchos años, la humanidad ha sido lenta en reconocer el cambio climático. Estamos ante una nueva era, debemos utilizar energía limpia, invertir más en energías renovables. El objetivo es reducir las emisiones, precisamente esta semana hablaré con los miembros de la G20 sobre este tema. No hay un solo país que pueda responder a este reto solo, por eso Estados Unidos quiere aliarse a otros países en esta lucha”, aseguró Obama.
El mandatario estadounidense también propuso la creación de una Asociación con las Américas en vista de la conferencia de Copenhagen, la cual aseguró que espera “sea un paso adelante”.
“Salvar el planeta es más barato que aniquilarlo”
El Presidente Oscar Arias, aseguró que la lucha contra el calentamiento global vale más que una lucha contra un enemigo invisible, según el mandatario “solucionar el problema del calentamiento global y preservar la vida, costaría sólo una fracción de lo que cada año destinamos a la empresa de la muerte. Con apenas un porcentaje de los 13 millones de millones de dólares, que como mínimo, se destinarán al gasto militar en los próximos diez años, podríamos cubrir la totalidad del costo estabilizar las emisiones de gases en el mundo”, dijo.
Arias abogó por la utilización de recursos económicos para combatir la degradación del ambiente e instó a los países desarrollados para que disminuyan el gasto militar y lo implementen en acciones para el ambiente.
“El más cínico de los generales podría decir que la demencial carrera armamentista constituye una reserva para emergencias futuras. Hoy quiero decirles que la emergencia ha llegado. El mundo tiene en el gasto militar una cuenta de ahorros que debe ser empleada para salvar a nuestra especie contra un enemigo que es real. Y puede hacerlo sin renunciar a la seguridad de sus ejércitos, cuya necesidad no comparto pero entiendo. Se trata de corregir los excesos en un lado, para atender las carencias en el otro, porque de nada nos servirá contar con submarinos nucleares cuando el océano sea una pila ardiente, con helicópteros artillados cuando el cielo sea una nube negra, o con misiles que no tendrán en la mira más que cucarachas en el desierto”, dijo el mandatario”, manifestó.
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